Protestas por el fuerte aumento del inmobiliario rural

En Salto el aumento representaría cerca del 80 %. Los productores reclamaron el martes en la legislatura provincial. El gobernador Scioli insiste con el impuestazo. Presencia saltense en la protesta.



El martes pasado, una gran nutrido grupo de productores locales se sumó a la movilización y protesta que realizaron los productores agropecuarios de toda la provincia por el impuestazo que Scioli implementó para la tasa del inmobiliario rural y urbano.
El incremento en tributos, que ya cuenta con media sanción de Diputados de la Legislatura bonaerense, fue definido como "un nuevo atropello fiscal” por los productores. Al cierre de nuestra edición se desarrollaba la sesión en la Cámara Alta de la legislatura bonaerense, que decidirá finalmente la implementación del aumento de los impuestos. EL NORTE, estuvo en contacto con productores autoconvocados que tuvieron la oportunidad de ingresar el martes a la Legislatura junto con dirigentes agropecuarios. La sensación luego de esta ardua jornada de protesta y movilización es desalentadora, “los senadores nos manifestaron que es altamente improbable que no se aprueben estos aumentos en la Cámara. Además, tampoco nos dieron demasiadas esperanzas de que esto cambie a partir de diciembre (con la nueva composición de la cámara) porque siempre el Ejecutivo tiene poder de veto. Lo que quiere hacer Scioli es una barbaridad”. Esto quiere decir que si a partir de diciembre, cuando la Cámara pierda la mayoría directa del oficialismo, y se presenten modificaciones a la normativa de suba de impuestos, todavía el gobierno de Scioli podrá vetar las modificaciones y dejarlas sin efecto, manteniendo esta “estocada mortal para miles y miles de productores de la provincia, así como también para otras actividades que se verán seriamente afectadas por una medida que sólo busca recaudar en lugar de resolver los problemas que agobian a los bonaerenses”, como señalaron productores locales.



Frente a los rezagos de la protesta en rechazo a la reforma, el gobernador Scioli defendió la medida ante los medios, afirmando que la norma busca lograr “equidad”. Defendió en forma íntegra la iniciativa que impulsó su administración y definió la reforma como "parte de las políticas que se están impulsando para concretar cambios estructurales en la provincia".

Desde la Sociedad Rural Argentina se indicó que el "impuestazo" sigue la línea de un "gobierno sometido al poder nacional, incapaz de reclamar los fondos que le pertenecen por coparticipación federal, e ineficaz para administrar su propio presupuesto". La nueva imposición a la carga y descarga de buques en puertos bonaerenses, así como los aumentos en las valuaciones fiscales y alícuotas para el Inmobiliario Rural e Ingresos Brutos, "son manifestaciones de desconocimiento, o de ensañamiento con el productor agropecuario, que viene de enfrentar una de las mayores sequías de la historia”.

Mientras tanto, el productor sigue sin contar con reglas claras para planificar su inversión. El precio de lo que produce se encuentra atado al humor y a las necesidades fiscales de un Gobierno que utiliza la estructura del Estado tanto para disciplinar a los sectores que se oponen a su línea de acción como para promover los negocios de los grupos que le son afines.

Los impactos locales del impuestazo
La Reforma Fiscal 2010, que impulsa el gobernador bonaerense, significará para Salto, concretamente: aumenta entre el 77 y el 80% del inmobiliario rural, a partir de un revalúo de las propiedades. Para el inmobiliario urbano el aumento rondaría el 20%. “Otra cosa que repercute son los aumentos en los porcentajes para Ingresos Brutos, sobre la venta de cereales y oleaginosas aumentó del 1 al 3% y para los servicios de los trabajos agrícolas aumenta del 3% al 4,5% en algunos casos”, explicó a EL NORTE el presidente de Federación Agraria local, Alejandro Coreski.