La buena voluntad no alcanza

El problema de la basura no es nuevo. El basural se encuentra colapsado y no hay, a la vista, un comienzo de resolución del problema.
Los distintos gobiernos locales mantuvieron reuniones con funcionarios provinciales y nacionales, con jefes comunales de localidades parecidas a Salto, con especialistas en el tema, con los vecinos. Además, como no ocurre en otras áreas con la misma facilidad, el problema de la basura está al alcance de nuestros sentidos.
Ahora, Brasca dice tener una propuesta para esta problemática, pero no hay muestras claras de avances en ese sentido. Los concejales del Acuerdo Cívico y Social elaboraron y presentaron un proyecto específico sobre el Programa de Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos. Ya sabemos los saltenses que existía un plan para el tratamiento de residuos que la gestión anterior no llegó a concretar, y que los sucesivos intendentes no perdieron el tiempo en descartarla como opción.
El pueblo crece demográficamente, y también deberíamos hacerlo crecer en ciudadanía. Dejar de echar por la borda un proyecto porque sea presentado por personas de otro color político, o porque no nos gusta su cara.
La administración de Burgos dejó máquinas compradas, postes, alambrado perimetral para cercar la zona de la Planta de Reciclado de Residuos Sólidos Urbanos. Contaba con documentación en regla y aprobación de Política Ambiental del gobierno de la Provincia para la instalación de la planta en zona rural.
Para que existan soluciones reales, no alcanza sólo con buena voluntad.